“Ofrecerse por un puñado de votos y una gloria sin honor”

Agustín Ferrer Ortiz.-

El en otros tiempo tan digno e intocable super juez Garzón y hoy venido a menos por esas cosas de sus miserias jugando a ser un Dios en el Olimpo de la izquierda española, se ha unido ahora a un puñado de rojillos baratos sin futuro para ayudar al Partido Socialista Español a desbancar al partido Popular de la gloria del poder lograda por obra y gracia de los votos de una ciudadanía cansada de tiranos rojos venidos a creadores de paro y saqueadores de cajas repletas de millones de euros.

Garzón metió la pata hasta el fondo con su dichosa manía de abrir fosas de quienes ya estaban descansando de una revuelta que forma parte de la historia de España, de unos muertos que nadie quería remover a excepción de un demente político que denominó, a esas falacias paranoicas que le turbaban la mente,  “Memoria Histórica” sin dar opción a otros a entender que era eso pues solo tenía cabida para una ideología política que está convirtiéndose en algo caduca, sin sentido y a las pruebas nos remitimos cuando vemos la desbandada de socialistas contrarios a estas majaderías históricas, porque la historia, por mucho que se quiera, ni se puede cambiar, ni se puede manipular.

Su andadura en épocas gloriosas del socialismo español de la mano de Felipe González cuando, le salió de verdadera pena ya que actuaron con él como con aquel al que le decían lo de prometer hasta meter y después de meter, nada prometido y a este, le metieron la estocada hasta la bola (como se dice en  el argot taurino) y Felipito se lo dejó sentado en un escaño del Congreso tal vez como venganza por alguna “garzonada” que no le gustó al gran líder y saliendo como gato escaldado que del agua fría huye para regresar a sus juzgado desde donde dominaba y se sentía como ese Dios que siempre quiso ser.

 

Ahora Garzón quiere regresar a la arena política tras su pericia con fracaso rotundo por Argentina, tras no haber conseguido que los muertos de la guerra le siguieran en sus propósito y se une a, como dije antes, rojillos sin futuro para tratar de derrocar al partido Popular y dejarlo fuera en los próximos comicios, pero habrá que ver si Rubalcaba y sus chicas, Elena Valenciano y Soraya González y en especial la vieja guardia y núcleo duro del partido están por la labor de contar con los odios que este ínclito juez destila contra el Partido Popular y con todo aquello que tenga un ligero tufillo a derecha recalcitada y sinceramente tengo mis serias duda que el líder socialista que a la sazón ya tienen los días contados en el sillón del partido, quiera contar con un elemento que por otra parte y así se nota en  sus fríos saludos, nunca ha sido santo de su devoción y dejará las bases marcadas para que nadie negocie con el ex juez supremo que pedirá algo más que unos pocos euros y un puñado de votos para dedicar su tiempo en exclusiva a los menesteres de derrotar al oponente.

 

Por otro lado mal le van las cosas a la extrema izquierda cuando tiene que recurrir al apoyo y la voz de Garzón y ofrecerse al Partido Socialista cuando lo normal sería ofrecer a la ciudadanía un programa serio que ayude a resolver los problemas que España tiene y no meterse a miserables guerrilleros a sueldo de otros porque España lo que necesita más que nunca es una verdadera unión y no la desunión que está promoviendo ansiosamente la izquierda, ya que es l única forma de generar empleo, generar valores económicos importantes y respeto por parte de los ciudadanos que son los que sufren verdaderamente las consecuencias de políticos cretinos y machotes garzonianos con ínfulas endiosadas que de nada sirven y a nada conducen.

 

Garzón una vez más no solo mete la pata hasta el fondo y se equivoca, sino que saldrá muy mal parado y será una sombra oscura, una mancha olvidada en la historia de España.